"Cuatro voces, cuatro corazones": Un negocio familiar está floreciendo en Phoenix

Los días largos y estresantes no son inusuales para Emmanuell Maldonado. Pero el restaurador de Phoenix estaba especialmente agotado por su reciente temporada en el mundo del espectáculo.

A principios de este mes, Maldonado y su padre, ambos grandes fanáticos del fútbol, habían estado encantados de pasar el día con el futbolista mexicano Héctor Herrera y el actor Cristo Fernández, más conocido como el exuberante Dani Rojas de "Ted Lasso", filmando un video destacando a los pequeños negocios como parte del patrocinio de Mastercard en el torneo de fútbol de la Copa América de la CONMEBOL.

Justo después de que el director indicara el corte, estaban de vuelta en el negocio, preparando platos como camarones marinados en jugo de lima, pulpo a la parrilla y mango habanero aguachile para  los clientes agradecidos en su cantina de mariscos mexicanos Mariscos Playa Hermosa.

"Bromeaba con mi padre: 'Vamos a dejar el mundo de la actuación", dice Maldonado. "¡No queremos ser actores!"

Como le gusta decir a Dani Rojas, "el fútbol es vida", y para los latinos, el fútbol es una forma de vida, es parte de quiénes son y de cómo se conectan entre sí. Como parte de su patrocinio de la CONMEBOL Copa América, Mastercard decidió destacar a los Maldonado y proporcionarles recursos de Mastercard, como su kit de herramientas para pequeñas empresas Digital Doors para ayudarles a acelerar el crecimiento de la economía digital.

El restaurante de los Maldonado es un lugar de reunión en la comunidad para los fanáticos del fútbol y los amantes de la comida por igual, dice Rustom Dastoor, vicepresidente ejecutivo de marketing y comunicaciones en las Americas, de Mastercard. "Realmente encarnan el espíritu implacable que caracteriza a los propietarios de pequeños negocios, queríamos darles una plataforma para brillar".

El video, que muestra a Herrera y Fernández reemplazando a los Maldonado en el restaurante para que pudieran asistir al partido, se emitió esta noche durante el partido México contra Ecuador en Phoenix, después del cual la cámara encontró y enfocó a la familia en las gradas, animando al equipo de México. El video también mostraba a los Maldonado apoyando a su familia extendida en México enviando dinero a casa a través de Paysend, que utiliza las capacidades transfronterizas de Mastercard para transferencias instantáneas de tarjeta a tarjeta.

Después de todo, la familia construyó sus restaurantes, dice Maldonado, quien los dirige con sus padres y su hermana. "Somos cuatro socios, somos cuatro voces, somos cuatro corazones que vierten todo lo que tenemos en nuestros negocios familiares".

De una "larga, larga lucha" al éxito

Puede que Maldonado no encuentre una segunda carrera frente a la cámara, pero él en un inicio tampoco había pensado en unirse a la industria del negocio familiar. Pero en 2016, cuando acababa de salir de la facultad de derecho y estaba estudiando para el examen del colegio de abogados de Arizona, su padre le pidió que le ayudara en su restaurante.

Fue la primera de muchas veces que Maldonado ha tenido que repensar sus estrategias profesionales frente a desafíos inesperados, y cada vez ha salido adelante con más fuerza y con un mejor modelo de negocio, gran parte del cual ha surgido de la adaptación de la tecnología y herramientas digitales.

Maldonado y sus tres hermanas mayores crecieron ayudando en el restaurante. Sus padres, José y María, habían trasladado a la familia de Salvatierra, México, a Phoenix en 1990, justo antes de que naciera Maldonado, y habían utilizado sus ahorros para comprar el restaurante en 2002. Pero el negocio presentó lo que él llama una "larga, larga lucha". Después de haber sobrevivido a la recesión de 2008, el restaurante estaba empezando a ganar fuerza en 2016, cuando María fue diagnosticada con cáncer y al mismo tiempo, José se enfrentó a sus propios problemas de salud.

"Mi padre vino a mí y me dijo: 'Sé que tienes mucho que hacer, pero no tenemos un plan B; ¿puedes ayudar?'" Maldonado recuerda. "Si conoces la cultura mexicana, sabes que un hombre mexicano no pide la ayuda de su hijo, así que esto fue un gran problema". Dejó de lado estudiar para el examen de abogacía y le dijo a su jefe en un bufete de abogados de Phoenix que se tomaría un tiempo libre.

Pronto había pasado un año y medio, y mientras sus padres se estaban recuperando, Maldonado se dio cuenta de que había encontrado su vocación interior como empresario y quería seguir los pasos de su padre para unirse al negocio familiar.

Lanzó cuentas de redes sociales para Mariscos Playa Hermosa, con lo que logró atraer a nuevos clientes, y comenzó a traer nuevas ideas. Maldonado, su esposa, Anna, y sus padres viajaban a menudo, salían a comer y beber en lugares nuevos, desde Guanajuato, en el centro de México, hasta Navojoa y Sonora, en el norte. Luego volvieron a trabajar con nuevas ideas para llevar al restaurante y la gente se empezó a dar cuenta de esto.

Con el auge de los negocios, tanto el padre como el hijo trabajaban de 60 a 70 horas a la semana para mantener el ritmo y Maldonado apenas tenía tiempo para pasar con su hijo recién nacido. "Pensé que no podíamos ser más grandes", dice, pero se equivocó.

Un giro pandémico y un cambio digital

Cuando la pandemia forzó cierres en marzo de 2020, Maldonado se encontró atrapado con 400 libras de ceviche recién hecho. Ansioso por ayudar a alimentar a su comunidad, utilizó su extensa presencia en las redes sociales para notificar a las personas que estaban regalando el pescado. Incluso terminaron compartiendo bolsas de ingredientes de otros restaurantes que de otro modo también se desperdiciarían.

Para su sorpresa, en las próximas semanas, la gente apoyó el restaurante solicitando pedidos para llevar. "El teléfono estaba sonando, así que empezamos una plataforma de comida para llevar", dice. Una vez que terminaron los confinamientos, el restaurante fue más fuerte que nunca.

Si bien tuvieron que improvisar rápidamente, la reducción de las horas de pandemia proporcionó a los Maldonado la oportunidad de buscar formas de trabajar de manera más inteligente y creativa. Maldonado y su padre han aprendido a delegar algunas de sus operaciones diarias para centrarse en la innovación y la expansión.

Abrieron otro restaurante mexicano en Phoenix, Cielo Rojo, a finales de 2023. En ambos lugares, tienen como objetivo sorprender a los clientes con sabores y emocionarlos con el ambiente, así como el servicio. "Quiero que las personas sientan la calidez del buen servicio al cliente", dice Maldonado. "Quiero que prueben la comida y se sientan como '¡Carajo, estoy en México!'"

También están tratando de pasar más tiempo fuera del restaurante juntos. Y ciertamente, asistir al partido de fútbol de la Copa América esta noche fue una salida familiar que el padre y el hijo nunca olvidarán.

Como el día en que Hererra y Fernández visitaron su restaurante. Quips Maldonado: "¡Decidimos convertirlos en camareros honorarios de por vida!"