Generación Z: Maestros de la tecnología pero ¿A qué precio?

La generación Z, los nacidos a finales de la década de 1990 y principios del 2010, ha crecido en un mundo dominado por la tecnología. Son los primeros nativos digitales y han estado rodeados de teléfonos inteligentes, redes sociales e Internet desde la infancia. Y aunque esta familiaridad con la tecnología les ha hecho increíblemente competentes a la hora de navegar por un mundo digital sin problemas, también les ha planteado otros retos.

Habilidades de mecanografía: Rápidos... y menos precisos

Uno de los ejemplos más claros del dominio tecnológico de la generación Z es su forma de teclear. Mientras que los usuarios de más edad pueden haber sido entrenados para centrarse en la precisión en un teclado físico, la generación Z suele escribir en pantallas táctiles, donde la velocidad es clave.

Según un artículo publicado recientemente en The Wall Street Journal, esta generación ha desarrollado un estilo de mecanografía único, rápido y centrado en el pulgar, que contrasta con las habilidades tradicionales de mecanografía táctil de las generaciones anteriores. Eso ya no forma parte de la mayoría de los planes de estudios: El porcentaje de estudiantes que se gradúan de secundaria en EE.UU. con una clase de mecanografía en su expediente académico cayó del 44% en 2000 al 2,5% en 2019.

Este énfasis en la velocidad por encima de la precisión tiene sus desventajas. La dependencia de la escritura con el pulgar y de las funciones de autocorrección significa que muchos miembros de la generación Z simplemente no desarrollan el mismo nivel de precisión en sus habilidades de mecanografía. Este enfoque en la velocidad podría dificultar su adaptación a situaciones que requieren una escritura detallada y sin errores, especialmente en entornos profesionales en los que una comunicación clara es fundamental.

Brecha generacional en ciberseguridad

Quizás aún más preocupante, una encuesta reciente de EY encontró que los empleados de la generación Z y Millennial se sienten menos equipados para identificar y responder a las amenazas cibernéticas en comparación con sus colegas mayores.

Los encuestados de la generación Z eran mucho más propensos que los de generaciones anteriores a admitir que habían abierto un enlace sospechoso, según la Encuesta sobre Riesgos Humanos en Ciberseguridad de 2024, y sólo el 31% se sentía muy seguro identificando intentos de phishing, un porcentaje significativamente inferior al 40% de su mismo grupo que respondió de forma similar en la encuesta de 2022.

Pero la generación Z, también se caracterizaron como más conocedores de la ciberseguridad en 2024 que en 2022. “Esto pone de evidencia una paradoja: un mayor conocimiento se ha traducido en un mayor temor”, según el informe. “Los empleados están procesando la gravedad de los riesgos, pero no necesariamente se sienten más preparados - y, entre las generaciones más jóvenes en las primeras etapas de sus carreras, les preocupa que un paso en falso pueda tener repercusiones.”

La buena noticia, según EY: las empresas pueden crear más oportunidades para equipar mejor a los trabajadores más jóvenes para que conviertan este conocimiento en confianza invirtiendo en la mejora de sus competencias y en una formación que se adapte a su experiencia única como verdaderos nativos del mundo digital.

¿Dependencia excesiva de la IA?

Desde las revisiones gramaticales automáticas hasta la investigación impulsada por la inteligencia artificial y los asistentes virtuales, la generación Z utiliza herramientas de IA para mejorar la productividad. Y aunque, esta dependencia de la IA puede agilizar las tareas y aumentar la eficiencia, también puede crear una brecha en habilidades esenciales, como la resolución de problemas, la colaboración y la comunicación.

Una encuesta reciente de TalentLMS mostró que casi la mitad de los profesionales de la generación Z dicen que confían más en la IA para orientarse en el trabajo que en sus jefes. Casi la misma cantidad afirma que prefiere preguntar a la IA sobre cuestiones relacionadas con el trabajo en lugar de preguntarle a sus compañeros o jefes.

Al depender de la IA para realizar tareas como el análisis de datos o la toma de decisiones, es posible que la generación Z no desarrolle las habilidades necesarias para resolver problemas por sí misma, o podría limitar su creatividad o innovación. Y mientras que los encuestados dicen que las habilidades digitales y técnicas son las más cruciales en la era de la IA - más importantes que las habilidades interpersonales y la inteligencia emocional - el 63% dijo que la integración de la IA en el lugar de trabajo debe ir acompañada de la formación en habilidades blandas, que según los autores del informe “puede ser un antídoto contra la desconexión y el aislamiento de la era digital.”